Consejos prácticos para visitar Cracovia

· Cracovia es en general una ciudad segura para el viajero, aunque como centro turístico de Polonia por antonomasia es enclave de pequeños hurtos, especialmente en lugares concurridos y transportes públicos. El número de robos de coches va in crescendo, por lo que os recomendamos no aparcar en lugares apartados.

· Si decidís hospedaros en el centro del casco antiguo, especialmente cerca de la “Rynek Glowny”, tened en cuenta los ruidos derivados de la ajetreada vida nocturna de sus diversos restaurantes, bares y otros locales de entretenimiento. Si ello puede suponer un problema para vosotros y vuestras preciadas horas de sueño, pedid una habitación interior, pese a que las vistas desde sus ventanas sean menos gratas e inspiradoras.

· Consejos prácticos en cuanto a transportes se refiere, reiterar que si no validáis vuestros billetes al entrar en el tranvía o bus, éstos no os servirán de nada y si la mala fortuna os acompaña y os topáis con controladores, deberéis pagar una multa al acto (que suele rondar los 50 PLN). Por supuesto, siempre podéis optar por el camino de la negociación, pero creedme al deciros que la mayoría de estos no están abiertos a la misma, y menos con los “euroturistas”. Los carnets de estudiante extranjero no autorizan al billete estudiantil.

· De nuevo, aunque no extensamente, mencionar el tema de los taxis. Éstas son las compañías registradas: Taxi 9191, Taxi Barbacan, Taxi Mega, Krak Taxi, Tele Taxi, Partner, Royal, Taxi 422 22 22. ¡No existen las marcas blancas!

· Tened cuidado de que no os timen vendiéndoos ámbar falso (en la sección De compras os mencionamos algunas tiendas de confianza).

· Está prohibido el consumo de alcohol en los sitios públicos y la posesión de droga, incluso en cantidades microscópicas. Sin hacer distinción entre duras o blandas, es un delito severamente penado con hasta tres años de cárcel.

· Si bien se aconseja visitar Cracovia en los meses primaverales y estivales, durante los mismos la excesiva concurrencia de turistas puede resultar un problema, traducido en largas colas a la hora de visitar los más demandados lugares de interés, como el Castillo de Wavel, o de conseguir mesa en los más populares restaurantes. De octubre a abril, no puede faltar en nuestra maleta la ropa de abrigo, bufandas, guantes y gorros, además de paraguas o chubasqueros. Los zapatos cómodos son obviedad.

· Es común encontrar cerrados los sectores de algunos museos, sin la correspondiente reducción de precio en el ticket de entrada. De tal modo, si hay algo que realmente deseáis visitar, aseguraos previamente de su disponibilidad preguntando con anterioridad al personal.

· En Cracovia, no podréis cambiar moneda en los bancos, sino en los establecimientos llamados “kantor” (os sugerimos los ubicados en la calles Wielopole y Florianska). Es preferible llegar de España con unos 50 euros ya cambiados en zloties, para no ser estafados por las casas de cambio de los aeropuertos y para posibles pagos en pequeños comercios o taxis. El uso de tarjetas de crédito está muy extendido, a excepción de en los dos casos anteriormente mencionados. El número de cajeros automáticos es copioso.

· Existen servicios de roaming con las compañías telefónicas españolas. Con encender vuestro celular al llegar a suelo polaco, éste automáticamente se conectará a uno de los operadores locales, como ERA, GSM, Centertel o Polkomtel.

· Pongamos en las peores situaciones. En caso de robo, de pérdida de documentación o de cualquier otra situación que requiera ser denunciada o la presencia policial, deberéis emplazaros hasta la comisaría de la calle Szeroka, número 35 (en el barrio judío y abierta las 24 horas). Si vuestro nivel de polaco o inglés no os posibilitan la comunicación, se requerirá la presencia de un traductor jurado, servicio gratuito para el turista.

Atended así mismo al hecho de que el Consulado de España está en Varsovia y no en Cracovia, así que en caso de pérdida de documentación y tras la correspondiente denuncia en la comisaría, deberéis trasladaros hasta la capital polaca para que vuestra identidad pueda ser confirmada y para poder continuar con el viaje. Advertencia, entonces, para evitar tales trámites burocráticos: ¡al tanto con la documentación!

· Algunos teléfonos de emergencia: ambulancias, 999; policía, 997/112; bomberos, 998; guardia urbana, 986 (por si os encontráis con un cepo en la rueda del coche). En la calle Lazarza, 14 un centro de urgencias médicas y en Galería Krakowska, una farmacia de guardia.

· Y un último, pero no menos práctico consejo, compraros una guía que incluya un vocabulario básico (en caso de no hablar polaco). Ello os facilitará muchas tareas, por ejemplo la compra de sellos (“znaczki”), puesto que los funcionarios de correos no necesariamente hablan inglés.